Descripción General: Simacota, situado en la provincia de Mares, es un municipio de gran riqueza histórica y cultural, con paisajes naturales que lo convierten en un lugar atractivo para el turismo rural y ecológico. Este destino combina tradición, naturaleza y una comunidad cálida que preserva sus costumbres.
Atractivos Turísticos:
Iglesia de Nuestra Señora del Carmen: Un hermoso templo colonial que es el epicentro de la vida religiosa y cultural del municipio.
Río Chicamocha: Ofrece oportunidades para nadar, pescar y disfrutar de la tranquilidad natural.
Quebradas y cascadas: Espacios ideales para el ecoturismo y la exploración.
Caminos ancestrales: Senderos históricos que conectan con otros municipios y destacan por sus vistas panorámicas.
El Mirador de la Colina: Un lugar que ofrece vistas espectaculares del municipio y sus alrededores.
Actividades y Experiencias:
Turismo rural: Participa en actividades agrícolas como la siembra y cosecha de productos locales.
Senderismo: Explora caminos naturales rodeados de montañas y vegetación.
Pesca artesanal: Una actividad relajante en los ríos y quebradas de la región.
Festividades culturales: Vive las tradiciones del municipio a través de sus celebraciones y eventos.
Gastronomía:
Mazamorra y mute santandereano: Platos tradicionales elaborados con ingredientes frescos de la región.
Tamales santandereanos: Preparados con masa de maíz y carnes locales.
Dulces artesanales: Como el bocadillo de guayaba y el arequipe casero.
Chicha y guarapo: Bebidas típicas que resaltan las raíces culturales de la región.
Eventos y Festividades:
Fiestas Patronales de Nuestra Señora del Carmen (julio): Incluyen misas, procesiones, ferias gastronómicas y actividades culturales.
Semana Santa: Conmemoración religiosa de gran solemnidad, que atrae a visitantes y residentes.
Festival del Río Chicamocha: Resalta la importancia de los recursos hídricos con actividades recreativas y culturales.
Artesanías y Productos Locales:
Café y panela: Producidos en fincas locales con técnicas tradicionales.
Tejidos y bordados: Elaborados por artesanas locales, con diseños únicos.
Miel y productos apícolas: Producto de colmenas locales, destacándose por su pureza.
Dulces y conservas: Hechos con frutas de la región como guayaba, mora y maracuyá.